lunes, 21 de octubre de 2024

MAGNA MARIANA JEREZ 2024 (2): MARÍA SANTÍSIMA DEL AMPARO


Nueve días después de su traslado a la Ermita de la Yedra (ver), María Santísima del Amparo, de la Hermandad de la Sed, se ponía de nuevo en la calle bajo el palio de la Virgen del Mayor Dolor de Ayamonte. Qué bien ha escogido palio esta hermandad para la Magna. Suponemos que habrá tomado para cuando la dolorosa pueda unirse al cortejo de la cofradía abriendo el Lunes Santo desde las Puertas del Sur.
A las dos y media se producía la salida y la Virgen del Amparo se separaba definitivamente de la Esperanza de la Yedra, con la que ha convivido desde el mencionado traslado. Y por la calle Empedrada fue buscando el inicio de la carrera oficial de la Magna, otra vez acompañada muy positivamente por la Banda Municipal de Música de Arahal.
Para esta segunda salida no se fundió cera nueva, con lo que el palio salió ya con los habituales 'mocos'. Esto contribuyó a mejorar la contemplación del rostro de la dolorosa, que en su mano izquierda volvió a llevar el corazón alado cedido por la Hermandad del Amparo de Sevilla. Precisamente, el consiliario primero y ex hermano mayor de dicha corporación sevillana, José Manuel Yuste, estaba por la zona contemplando a la titular de esta cofradía jerezana con la que tantos lazos de unión se han creado, y grabando con su móvil este momento.
La banda de Arahal interpretó por Empedrada la marcha "Mi Amargura", seguida luego por "Reina de la O" cuando el palio discurría junto al imponente monumento a Lola Flores. Al fondo asomaba la torre de la Parroquia de San Miguel, por la que la Virgen del Amparo iba a pasar en su camino a la plaza de la Asunción, punto inicial del recorrido común.
Con cambio de itinerario a la vuelta motivado por el retraso generalizado de la procesión, y con saludo a la Hermandad del Perdón antes de seguir a su barrio, la Virgen del Amparo se reunió con el Santísimo Cristo de la Sed minutos antes de la una de la madrugada. Se cerraban así unos días que, sin lugar a dudas, han marcado un antes y un después en la aún corta trayectoria de su hermandad.

































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