MAGNA MARIANA JEREZ 2024 (3): MARÍA SANTÍSIMA DE LA PAZ EN SU MAYOR AFLICCIÓN

Nos desplazamos hasta la Albarizuela, donde nos encontramos con el primer paso de palio cien por cien jerezano. Y no cualquier palio, sino una auténtica joya del bordado y la orfebrería que muchos consideran el de mejores proporciones de la Semana Santa jerezana. Y la dolorosa a la que cobija, María Santísima de la Paz en su Mayor Aflicción, es una talla de los años 40 del pasado siglo realizada por José Rivera García, quien restauró a la Virgen de la Angustia de Sevilla, en la que se basa la Virgen de la Paz.

Con el paso aún en el interior de la Capilla de los Desamparados, la Sociedad Filarmónica Nuestra Señora del Carmen de Salteras, encargada del acompañamiento musical en la primera parte de la procesión, interpretó la marcha "Coronación de Espinas", dedicada al Cristo de la propia hermandad.

Pronto se produjo la salida, desquitándose en parte la corporación de la lluvia del pasado Domingo de Ramos, cuando habría estrenado el segundo puesto en la reordenación de la jornada. 

Sonó entonces el Himno de España y, tras una breve parada, los músicos interpretaron la marcha "Aniversario en la Albarizuela". Con ella, el paso de palio comenzó a recorrer la calle Arcos, aunque por poco tiempo. Y es que, con la carrera oficial dispuesta en sentido contrario al habitual, la Virgen de la Paz en su Mayor Aflicción no siguió buscando el barrio de San Pedro, sino que giró a la izquierda en la calle Ávila. En el mismo inicio de ésta se detuvo para luego avanzar a los sones de "Saeta cordobesa", durante cuya interpretación la trasera del palio se enganchó con un cable que, gracias a la pericia de capataces y costaleros, y a la ayuda de un vecino, fue dejado atrás rápidamente. Y después del primer relevo de costaleros de la tarde, continuaría en la siguiente chicotá con "Pasa la Virgen Macarena".

Un clásico exorno floral de claveles blancos adornaba este perfecto paso de palio. La hermandad, consciente de la joya que atesora, ofreció durante todos estos días de atrás información sobre el patrimonio que lo compone a través de distintos carteles. Todo un acierto. Y es que no sólo hay que presumir de lo que se tiene, sino también saber hacérselo apreciar a quienes se interesan por conocerlo.

Y el remate para autóctonos y foráneos fue poder ver a la Virgen de la Paz en su Mayor Aflicción recorriendo en triunfo las calles de Jerez en una jornada que a esa hora de la tarde por la calle Arcos hacía soñar con un Domingo de Ramos, éste sí, de radiante sol para la Reina de la Albarizuela.