La Hermandad de los Gitanos celebró el pasado domingo la función solemne y posterior besamanos a María Santísima de las Angustias, que se situó para ello en el presbiterio de su Santuario, elevada sobre una peana de madera dorada en la que había algunas pequeñas flores blancas.
Para este culto, la Virgen de las Angustias vestía el manto procesional de terciopelo burdeos de Fernández y Enríquez, la saya del mismo color con bordados atribuidos a Rodríguez Ojeda, fajín hebraico del siglo XVIII, toca de sobremanto de tul de oro bordado en hojilla y un pecherín de encaje de oro sobre el que llevaba un puñal y pequeños broches. Sobre la cabeza tenía la corona de salida, en la mano izquierda un pañuelo y un rosario, y en la derecha, la que ofrecía a los devotos, dos medallas.
Junto a la imagen se colocaron dos jarras de su paso de palio sobre sendos pies de base cuadrada. Las jarras tenían diversas especies de flores de las mismas tonalidades que los bordados de las caídas de su palio. Otras dos jarras estaban en los extremos del presbiterio sobre altas columnas de madera dorada, mientras que detrás se podían ver más en distintos puntos del altar.
Un pabellón remataba el altar, que estaba formado por un gran cortinaje de terciopelo rojo ante el que se dispuso un dosel de cultos con una pequeña Inmaculada en su parte superior entre dos candelabros y cinco candeleros. Delante del dosel había una peana en la que estuvo la dolorosa durante el triduo en su honor celebrado días atrás.
A un lado y a otro se extendía un gran cantidad de candeleros con cera blanca ante los que había un manifestador con una pequeña talla del Niño Jesús, cuatro ángeles del paso de Nuestro Padre Jesús de la Salud y algunas flores de talco. Además, veíamos también dos de los Evangelistas del paso del Señor: San Lucas a la izquierda y San Juan a la derecha. Por último, hay que mencionar que en la base del altar estaban algunas piezas de las andas en las que presidió el Nazareno el Vía Crucis de las Cofradías en 2020, así como parte de los faldones de su paso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario