miércoles, 20 de septiembre de 2017

LA VIRGEN DE LA LUZ, EXPUESTA EN BESAMANOS TRAS SU SALIDA PROCESIONAL


El pasado lunes, dos días después de su salida procesional (ver), la Iglesia de San Esteban acogió el besamanos a Nuestra Señora de la Luz, que se presentó a los devotos en la capilla sacramental del templo y vestida tal cual la vimos por las calles la noche del sábado.
Así, la Virgen se encontraba en el centro de la capilla con su manto y saya de tisú celeste, toca de sobremanto, corona, ráfaga, cetro en la mano derecha y media luna a sus pies. Estaba además elevada sobre una peana plateada. El rosario estaba sujeto por las manos derechas de la Virgen y del Niño, como igualmente ocurrió durante su salida, y otro rosario más tenía también en la derecha.
Como exorno de este besamanos se utilizaron los mismos centros florales que adornaron el paso procesional, conformados a base de rosas blancas, gladiolos y nardos. Las flores estaban repartidas en dos centros flanqueando a la Virgen de la Luz, otros dos detrás sobre sendas mesas de madera dorada y en el suelo delante de la imagen.
Completando el altar del besamanos veíamos tres candeleros dorados con cera blanca a cada lado de la Virgen, mientras que fuera de la capilla, junto a la reja de acceso, estaban el simpecado en el lado izquierdo y el estandarte corporativo en el derecho.
































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