jueves, 9 de julio de 2020

LOS TITULARES DE LA TRINIDAD CAMBIAN PROVISIONALMENTE SU UBICACIÓN


La Hermandad de la Trinidad ha iniciado estos días unas obras de reparación en la capilla que ocupa en la Basílica de María Auxiliadora y que consistirán en pintar todo el espacio, recuperar las pinturas murales de la entrada, restaurar el presbiterio y arreglar la azulejería.
Por este motivo, algunas de las imágenes de la hermandad han sido trasladadas provisionalmente a distintos lugares del resto del templo, a excepción de la Virgen de la Concepción, San Juan Evangelista y San Miguel, que están ocultas en las dependencias de la corporación.
Al entrar en la Basílica nos encontramos en primer lugar con el misterio del Sagrado Decreto de la Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo), en la capilla ubicada frente a la de la propia hermandad. El conjunto trinitario está delante de la talla del Señor Atado a la Columna de Juan Giralte, el titular más antiguo que se conserva de los varios que tuvo a lo largo de su historia la Hermandad de las Cigarreras.
Las imágenes del Sagrado Decreto de la Trinidad están elevadas sobre una mesa de madera dorada y policromada con el escudo de la hermandad en el centro.







A continuación, encontramos al Santísimo Cristo de las Cinco Llagas situado ante el monumento dedicado a los mártires salesianos, junto a la capilla de la hermandad en la nave del Evangelio. El pie de la cruz cuenta con un paño de terciopelo negro, pero llama la atención la ausencia de candeleros, blandones e incluso flores junto al crucificado.






Finalmente, Nuestra Señora de la Esperanza ha sido llevada al retablo del Sagrado Corazón de Jesús, ubicado en el lado izquierdo del crucero de la Basílica, muy cerca de la titular del templo, María Auxiliadora.
La Virgen de la Esperanza ya estuvo en este lugar durante algunos meses en 2011, mientras se realizaban las obras de reforma y ampliación de los altares de la capilla de la hermandad. En aquella ocasión, el resto de imágenes (incluyendo a la Virgen de la Concepción y a San Juan) estaban a un lado y a otro de la dolorosa de Juan de Astorga (ver).






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