El Santísimo Cristo de la Providencia, de la Hermandad de los Servitas, estuvo ayer expuesto en solemne veneración en la capilla de la corporación, situado en el centro de ésta, sobre una estructura cubierta con un paño mortuorio.
Cuatro hachones con cera color tiniebla rodeaban a la imagen, mientras que en los laterales se podían ver las dos jarras del paso que el Cristo comparte con la Virgen de los Dolores, con diversas especies florales. Detrás estaban la dolorosa, vestida de hebrea, acompañada de San Juan Evangelista y Santa María Magdalena, obras todas, como el Cristo, de José Montes de Oca.
Estas tres imágenes estaban ante una cruz y sobre un monte de corcho salpicado de algunas flores. Además, la Magdalena se presentaba con apariencia de estar arrodillada. Junto a ellas estaban los faroles de entrevarales del paso de palio de la Virgen de la Soledad, y detrás dos parejas de blandones dorados con cera color tiniebla. Y entre cada pareja se veían unas flores de talco sobre el banco del retablo. Finalmente, en el camarín de la Virgen de los Dolores y del Cristo de la Providencia había dos pequeños faroles.
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