La Hermandad del Sol celebró este fin de semana el besapié al Varón de Dolores de la Divina Misericordia, que se encontraba en la capilla de la hermandad anexa a la Parroquia de San Diego de Alcalá, casi en penumbra. La imagen de José Manuel Bonilla Cornejo estaba ante el paso de palio de Nuestra Señora del Sol, que ya está en pleno proceso de montaje e incluso ya estaba subida en él la dolorosa, vestida de hebrea.
El Varón de Dolores, que lucía unas potencias doradas, estaba sobre una estructura de base cuadrada que sobre ella tenía diferentes especies florales, como lirios, astromelias o antirrhinum, todas ellas de tonalidades moradas o malvas. Junto a la imagen veíamos cuatro blandones de madera dorada y policromada con cera color verde, color que caracteriza a esta cofradía que abre el Sábado Santo sevillano.
Detrás, el paso de palio tenía en la parte delantera dos de los candelabros del paso del Varón de Dolores, pero sin los guardabrisas. Además, había diversos candeleros del palio colocados como únicos elementos de este paso que ya ocupaban su lugar, a falta del resto de la candelería, los faroles o las jarras. Tampoco estaban junto a la Virgen del Sol las imágenes de San Juan Evangelista y Santa María Magdalena.
Al fondo, presidía la capilla la Virgen de la Salud, talla letífica titular de la hermandad, mientras que en la parte inferior del altar estaban los respiraderos del paso del Varón de Dolores. En los laterales de dicho altar se encontraban San Juan y la Magdalena.
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