miércoles, 27 de noviembre de 2013

LA MADRE DE DIOS DE LUTO

Como ejemplo del modo en que la inmensa mayoría de las imágenes de la Virgen de nuestras hermandades se han presentado a los fieles durante este mes de noviembre, vestidas de luto, traemos a este blog una selección de fotografías de dieciocho dolorosas y dos titulares letíficas. Todas ellas aparecen en sus altares habituales de culto, tal y como sus devotos las han encontrado a lo largo de este mes que, en muy pocos días, dará paso al tiempo de Adviento.

MARÍA SANTÍSIMA DE LA AMARGURA (La Amargura)



NUESTRA SEÑORA DE LAS PENAS (Santa Marta)



MARÍA SANTÍSIMA DE LAS AGUAS (El Museo)



NUESTRA SEÑORA DE LOS DOLORES (El Cerro)



MARÍA SANTÍSIMA DE GRACIA Y AMPARO (Los Javieres)



MARÍA SANTÍSIMA DE LA ANGUSTIA (Los Estudiantes)



MARÍA SANTÍSIMA DEL DULCE NOMBRE (La Bofetá)



NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN EN SUS MISTERIOS DOLOROSOS
(Carmen Doloroso)



NUESTRA SEÑORA DE GUÍA (La Lanzada)



MARÍA SANTÍSIMA DEL BUEN FIN (La Lanzada)



MADRE DE DIOS DE LA PALMA (Cristo de Burgos)



MARÍA SANTÍSIMA DE REGLA (Los Panaderos)



NUESTRA SEÑORA DE LAS LÁGRIMAS (La Exaltación)



NUESTRA SEÑORA DEL VALLE (El Valle)



MARÍA SANTÍSIMA DEL MAYOR DOLOR Y TRASPASO (El Gran Poder)



MARÍA SANTÍSIMA DE LA ESPERANZA (La Macarena)



MARÍA SANTÍSIMA DE VILLAVICIOSA (Santo Entierro)



MARÍA SANTÍSIMA EN SU SOLEDAD (Soledad de San Lorenzo)



NUESTRA SEÑORA DEL CARMEN (Carmen de San Leandro)



NUESTRA SEÑORA DE ARACELI (Araceli)

martes, 26 de noviembre de 2013

EL NAZARENO CON LA CRUZ AL HOMBRO SERÁ RESTAURADO POR EL IAPH


Pasada la próxima Semana Santa de 2014 la imagen de Nuestro Padre Jesús con la Cruz al Hombro, de la Hermandad del Valle, será trasladada a las dependencias del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH) para ser sometida a una restauración.
Así lo acordaron hace algunos días los hermanos de la cofradía del Jueves Santo, que escucharon de boca de los restauradores Cinta Rubio y Gabriel Ferreras un informe sobre el estado de la talla, que presenta algunas fisuras y acumulación de suciedad, aunque no cuenta con graves problemas.
De esta forma, tras la Cuaresma y la salida procesional del Señor que preside el segundo paso de la Hermandad del Valle, el IAPH emprenderá la restauración de una talla cuyo autor se desconoce, ya que existen teorías diversas que la emparentan con José de Arce, Pedro Roldán o algún seguidor de Martínez Montañés, aunque todas coinciden en su realización en el siglo XVII.
Lo que hace ya tiempo que se descartó fue aquella repetida teoría según la cual este Nazareno fue el titular de la Hermandad del Gran Poder antes de que Juan de Mesa tallara al Señor de Sevilla.

lunes, 25 de noviembre de 2013

SACRA HÍSPALIS: "TOTA PULCHRA. MATER INMACULATA"


La compañera Irene Gallardo nos hace llegar información relativa a una nueva edición de "Sacra Híspalis", la serie de visitas culturales al patrimonio religioso y cofradiero de Sevilla que ella organiza. En esta ocasión, lleva por título "Tota pulchra. Mater Inmaculata" y está dedicada a la próxima celebración de la festividad de la Inmaculada Concepción.
Así explica Irene Gallardo el sentido de este nuevo itinerario: "Cada año por diciembre, la ciudad recupera la memoria de los tiempos y saca sus mejores galas para honrar a la Madre de Dios en la más bella expresión de pureza y dulzura. Es la fiesta de la Inmaculada Concepción de María Santísima.
Esta celebración llega a España en 1644, pero en Sevilla se celebra desde tiempo inmemorial. Un dato importante para apoyar esta aseveración es que en 1522 la Cofradía de la Limpia Concepción del Convento Casa Grande San Francisco fue la primera en hacer “voto de sangre” entre sus hermanos para defender la Inmaculada Concepción de la Virgen. Así lo mencionan, entre otros historiadores, Hilario Arenas en el diario ABC en 1975 y el antropólogo Isidoro Moreno en su libro “La antigua Hermandad de los Negros de Sevilla” en 1997. Así también lo realizarían en 1615 la Hermandad de sacerdotes de San Pedro Advíncula, que ha llegado hasta nuestros días, y la Hermandad de la Santa Cruz en Jerusalén, por iniciativa de su hermano mayor, Tomás Pérez. Roma no lo declararía Dogma de Fe hasta 1854. Sólo a modo de ejemplo hay que citar que ya desde 1578, la Catedral celebra la Fiesta de la Inmaculada.
No es nada extraño que fuese una cofradía ubicada en el Convento de San Francisco la primera en hacer “voto de sangre”. Recordemos que fueron los franciscanos precisamente los que apoyaron e impulsaron este principio. Más tarde el franciscano Francisco de la Róvere, que fue elevado a Papa con el nombre de Sixto IV, instituyó la Fiesta de la Inmaculada Concepción de María en 1475, concediendo indulgencias a quienes la festejaran. Escultores, orfebres, pintores, doradores, tallistas y bordadores dejaron para la posteridad en Sevilla la semblanza de la Inmaculada en sus bellísimas obras de arte".
El itinerario "Tota pulchra. Mater Inmaculata", que se realizará el próximo viernes 29 de noviembre, incluye visitas al Convento de las RR.MM Agustinas Concepcionistas de la Encarnación, al Convento de San Buenaventura y al Convento de las RR.MM Clarisas Capuchinas de Santa Rosalía. El lugar de encuentro será el Convento de la Encarnación, en la Plaza Virgen de los Reyes, a las cinco y cuarto de la tarde. El precio de inscripción es de diez euros, aunque es gratuito para los menores de catorce años. Las inscripciones deben realizarse a través de la dirección de correo sacrahispalis@gmail.com.

domingo, 24 de noviembre de 2013

CULTO A LA SUCIEDAD


Hablemos claro. La fotografía de la izquierda muestra una escultura sucia; la de la derecha, la misma escultura, pero limpia. No hay más. La vuelta de la Virgen de la Concepción a la capilla que la Hermandad de la Trinidad tiene en la Basílica de María Auxiliadora ha levantado una cierta polémica porque hay quien ve a la imagen muy distinta tras su restauración en el Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH).
Esto ha vuelto a avivar la vieja polémica entre lo que debe ser una restauración y lo que no. En el caso de la limpieza de las imágenes, los hay, por extraño que parezca, que son partidarios de limpiarlas, sí, pero hasta un cierto punto para evitar contrastes tan evidentes como el que vemos en estas fotografías de la dolorosa que acompaña en su paso de misterio al Cristo de las Cinco Llagas. Dicho de otro modo, los hay partidarios de dejar un poco de suciedad en las tallas, aunque en un alarde de eufemismo absurdo no lo llamen suciedad, sino "pátina del tiempo", "desgaste devocional" y otra serie de tonterías para no llamar suciedad a la suciedad.
Se llega así a algo tan ridículo como rendir culto a la suciedad. Se afirma que el imaginero talla y policroma, pero es el tiempo el encargado de "completar" la realización de una imagen. Todo, como digo, con tal de no reconocer que lo que está sucio, está sucio, y lo que hay que hacer es limpiarlo.
¿Que se producen grandes contrastes entre el antes y el después? Pues claro. Si no le quitamos el polvo a un mueble de nuestras casas durante 50 años, el día que lo limpiemos parecerá otro, uno nuevo, siendo en realidad el mismo que siempre ha estado ahí. No es que esté comparando una imagen devocional con un mueble. O sí, pero con respeto y, sobre todo, hablando claro. Una imagen es la representación de Dios, la Virgen o un santo; les rezamos, les tenemos devoción, les rendimos culto y los subimos a un paso. Sí. Pero no deja de ser una escultura de madera que, como cualquier objeto, se ensucia si no se cuida como se merece.
Y aquí es donde quería llegar. Son las hermandades las responsables del aspecto que llegan a tener sus imágenes. Si la Virgen de la Concepción no se hubiera restaurado o limpiado en 2013, sino diez, quince o veinte años antes, probablemente la suciedad acumulada no habría sido tanta como la que vemos en la foto de la izquierda, tomada en el besamanos del 8 de diciembre de 2012, y en consecuencia el contraste entre el antes y el después de la intervención no habría sido tan extremo.
El IAPH ha demostrado ya sobradamente su gran profesionalidad en la restauración de muchas imágenes titulares de nuestras hermandades. El Señor de Pasión, la Virgen de la Estrella, el Señor de la Salud y Buen Viaje, el Cristo de la Providencia, el Cristo de la Expiración del Museo o la propia Virgen de la Esperanza de la Trinidad son unos pocos ejemplos. En algunos de estos casos, por cierto, también hubo críticas a la "excesiva blancura" con la que regresaron a sus templos. Excesiva limpieza, habría que decir. Pero la limpieza no es algo malo. Sólo si nos gusta rendir culto a lo sucio podremos hablar de exceso.
El diccionario de la RAE define "restaurar" con tres acepciones: "recuperar o recobrar; reparar, renovar o volver a poner algo en el estado o estimación que antes tenía; y reparar una pintura, escultura, edificio, etc., del deterioro que ha sufrido".
Si le quitamos a una imagen la suciedad que ha acumulado, la estaremos recuperando, renovando, volviéndola a poner en el estado o estimación que antes tenía y reparándola del deterioro que ha sufrido. Ahora bien, si sólo le quitamos un poco de esa suciedad, en un porcentaje más o menos elevado, no podremos hablar de restauración, sino de un pasito atrás en un deterioro que seguirá presente, aunque en menor medida.
Desde luego, como depositarias de un legado que les viene del pasado y hay que dejárselo a los que vengan en el futuro, convendría que las hermandades no se dejaran nunca llevar por los que rinden culto a la suciedad, y apuesten siempre por restauraciones reales que no contradigan las definiciones del diccionario.

sábado, 23 de noviembre de 2013

SEVILLA EN JEREZ (XVIII): La Redención salesiana, de un beso a una bofetada

La Hermandad de la Redención es una de las que se incorporaron a la Semana Santa de Jerez en 2007, junto al Soberano Poder y el Consuelo, tras salir varios años en las vísperas. En su origen, los cofrades se fijaron claramente en Sevilla, aunque esa influencia quedaría un poco diluida por las circunstancias, como ahora veremos.
Fue en 1984, que Juan Pablo II convirtió en el Año Santo de la Redención, cuando un grupo de antiguos alumnos del Colegio Salesiano Manuel Lora Tamayo idearon la creación de una cofradía con esa advocación para su Cristo. Ese mismo año se encargaron las imágenes titulares al imaginero sevillano Juan González Ventura, que realizó las tallas de Nuestro Padre Jesús de la Redención y María Santísima Madre de la Iglesia, Auxiliadora del Pueblo de Dios.
La dedicatoria de este capítulo en nuestra serie "Sevilla en Jerez" viene motivada porque estos cofrades salesianos quisieron que el misterio del Señor de la Redención fuera precisamente el del beso de Judas, a imagen y semejanza de la popular hermandad del Lunes Santo sevillano.
Ésa fue la intención, pero la realidad acabó siendo bien distinta. Y es que el que fuera primer obispo de la Diócesis de Asidonia-Jerez, Rafael Bellido Caro, no era en absoluto amigo de crear nuevas hermandades. Siempre mantuvo que Jerez tenía suficientes (entonces eran treinta) y que no hacía falta ninguna más, pese al gran tamaño de la ciudad y el espíritu cofradiero que de forma imparable ha llevado en los últimos años, y sigue llevando, a crear nuevas corporaciones en barrios que no sabían de cofradías hasta hace bien poco.
La postura de Bellido Caro era inamovible, con lo que el proyecto de los antiguos alumnos salesianos quedó paralizado y las imágenes, que ya estaban en su poder, fueron ubicadas en la sede de su asociación a la espera de tiempos mejores.

Nuestro Padre Jesús de la Redención, obra de Juan González Ventura (Foto: pasionygloria.net)

Y los mejores tiempos llegaron. En 1996 el obispo de Jerez acepta que las imágenes sean bendecidas y pasen a recibir culto en la entonces capilla del colegio salesiano, y tres años después se funda la Agrupación de Fieles de Nuestro Padre Jesús de la Redención, hasta que el 8 de diciembre de 2004 la agrupación se convierte por fin en hermandad de penitencia.
Ocurrió, sin embargo, que en todo este proceso otra corporación, la Hermandad de la Clemencia, se había adelantado en la representación de la traición de Judas. Éste era el misterio que un grupo de jóvenes sacaban a las calles el Viernes de Dolores por el barrio de San Benito y en 1993, tras un largo proceso de integración en su parroquia, es aprobada como hermandad de penitencia por Rafael Bellido Caro, primera y única hermandad penitencial que el recordado obispo de Jerez accedió a aprobar en su larga trayectoria como pastor de la joven diócesis jerezana.
La fundación de la Hermandad de la Clemencia, que sale a las calles cada Martes Santo desde 2005, obligó a la Hermandad de la Redención a escoger otro pasaje evangélico para el paso de misterio, decantándose finalmente por el de Jesús ante Anás. El imaginero gaditano Luis González Rey fue el encargado de tallar todas las figuras secundarias de este nuevo misterio que se estrenó haciendo estación de penitencia en la Semana Santa el Jueves Santo de 2007. En la delantera vemos al Señor recibiendo la bofetada por parte de un sayón.

Paso de misterio de Nuestro Padre Jesús de la Redención en su salida desde el Santuario de María Auxiliadora (Foto: redencionjerez.blogspot.com)

Por último, hay que señalar que la dolorosa advocada como María Auxiliadora del Pueblo de Dios, obra también de Juan González Ventura, aún no forma parte del cortejo de la hermandad, que poco a poco va incrementando su patrimonio. En la cara de esta imagen vemos innegables reminiscencias macarenas, ya que su rostro, principalmente en los ojos y el entrecejo, presenta rasgos que recuerdan a la Virgen de la Esperanza.

María Santísima Madre de la Iglesia, Auxiliadora del Pueblo de Dios (Foto: fernandomoralesfotografia.blogspot.com)

viernes, 22 de noviembre de 2013

LA QUINTA ANGUSTIA TARDA EN VOLVER


El pasado mes de agosto era retirada del culto la Virgen de la Quinta Angustia para una restauración consistente fundamentalmente en la limpieza de la talla y la consolidación y fijación de la policromía.
En principio estaba previsto que esta actuación, encomendada a Esperanza Fernández Cañero, que colaboró con José María Leal en la restauración del Resucitado de Jerónimo Hernández de la misma hermandad, tuviera una duración de unos tres meses, por lo que se esperaba su regreso para finales de octubre o principios de noviembre.
Sin embargo, la impresionante dolorosa de Vicente Rodríguez Caso aún no ha vuelto a la Capilla del Dulce Nombre de la Parroquia de la Magdalena, donde su hueco se nota en gran medida en el conjunto escultórico del misterio de la cofradía del Jueves Santo. Habrá que seguir esperando el ansiado regreso de esta dolorosa hasta que pueda volver a ocupar su lugar a los pies del Señor del Descendimiento.

jueves, 21 de noviembre de 2013

PERIODISTA COFRADE, CON EL CORREO DE ANDALUCÍA


Periodista Cofrade quiere dedicar esta entrada a El Correo de Andalucía, diario decano de la prensa sevillana que a punto está de cumplir 115 años de existencia en un momento de absoluta incertidumbre sobre la continuidad del periódico e incluso, por surrealista que parezca, sobre quién es el propietario actual y qué planes tiene para la cabecera.
Lo único cierto es que la plantilla, formada únicamente por 53 personas tras los despidos de los últimos años, y entre los que se encuentra algún que otro compañero de promoción de este periodista cofrade, sigue sin cobrar ya varias nóminas atrasadas y sin saber qué será de ellos y de sus puestos de trabajo a corto plazo.
Traemos hoy a este blog al Beato Marcelo Spínola (1835-1906), fundador de El Correo de Andalucía en 1899. Se trata del azulejo pintado por Cerámica Montalbán hacia 1930 y restaurado por Alfonso Orce que presidió la redacción del periódico en la calle Albareda y posteriormente las instalaciones del Polígono Carretera Amarilla. Cuando el periódico se mudó a la Cartuja en 2004, sus responsables decidieron donar el retablo cerámico a la Hermandad de la Soledad de San Lorenzo, que tiene al Cardenal Spínola como titular desde el 15 de enero de 1997, y ésta lo colocó en la fachada de la Parroquia de San Lorenzo que da a la calle Eslava. En el propio retablo se hace constar que fue el fundador de El Correo de Andalucía e incluso aparece de pie, sosteniendo un ejemplar del diario en su mano derecha.
Pidámosle al Beato Marcelo Spínola su mediación para que la situación del periódico que fundó se reconduzca y no desaparezca un medio de comunicación que es referencia en Sevilla y que lleva casi 115 años contando las cosas de la ciudad, entre las que la vida cofradiera siempre ha tenido un lugar destacado en sus páginas. “Ni un solo trabajo, ni una línea ni una letra deje de encaminarse a la defensa de la verdad y la justicia”.


miércoles, 20 de noviembre de 2013

LA DOLOROSA DE SALVADOR MADROÑAL QUE HA ACABADO EN SAN GONZALO


No sin cierta polémica, la Parroquia de San Gonzalo cuenta desde septiembre con una nueva dolorosa, obra de Salvador Madroñal, quien la realizó en 2010 para el bordador José Antonio Grande de León. La advocación de la talla es Nuestra Señora del Consuelo y el primer templo donde pudo verse, únicamente con un fin expositivo, fue la Parroquia de San Lorenzo, donde estuvo expuesta durante la Cuaresma y la Semana Santa de 2012, como hicimos constar en la crónica del Viernes de Dolores de aquel año (ver aquí).
Grande de León la ha donado a San Gonzalo, cuyo párroco la ha acogido y la ha ubicado en un altar situado en el crucero de la parroquia trianera, justo frente al retablo de la Hermandad de San Gonzalo.
La Virgen del Consuelo ocupa el lugar que hasta ahora contaba con una sencilla cruz de madera que ha sido retirada. En su puesto, se ha colocado un dosel con un cortinaje rojo ante el que se sitúa una cruz arbórea con un sudario, y a sus pies la dolorosa de Madroñal, reproduciendo así la composición de María sola tras el traslado al sepulcro de Jesús. De vestirla se encarga su hasta ahora propietario, Grande de León.
La polémica que mencionábamos viene motivada por la existencia ya en esta parroquia de un clarísimo referente devocional mariano, como es Nuestra Señora de la Salud, que precisamente ahora no se encuentra al culto por la restauración que está llevando a cabo Pedro Manzano.
No es, ni mucho menos, el único templo en el que recibe culto más de una dolorosa, pero también es verdad que la Parroquia de San Gonzalo no tiene un gran patrimonio escultórico desde el punto de vista cuantitativo, por lo que la ubicación de una nueva dolorosa situada en frente de la Salud ha sido acogida con cierto recelo, quizá también por si la devoción a la Virgen del Consuelo aumenta y estamos ante el germen de una futurible agrupación parroquial y, más adelante, una nueva hermandad bajo el mismo techo que otra, lo que en Triana no se conoce desde el punto de vista penitencial desde los tiempos en que llegaron a coincidir en San Jacinto las hermandades de la Estrella, la Esperanza de Triana y las Aguas. O quizá estamos corriendo demasiado y no pasará nunca de ser una imagen más sin hermandad, como hay tantísimas otras en los templos sevillanos.
Por si alguien se lo pregunta, y pese a la ausencia temporal de la dolorosa del Lunes Santo, las misas en San Gonzalo siguen terminando con la Salve a la Virgen de la Salud...




martes, 19 de noviembre de 2013

EL CRISTO DE LA EXPIRACIÓN DEL MUSEO PRESIDIRÁ EL VÍA CRUCIS DE LAS COFRADÍAS


Tras el paréntesis del Año de la Fe y su frustrado Vía Crucis extraordinario, el próximo año volverá el tradicional Vía Crucis de las Cofradías del primer lunes de Cuaresma, que será presidido por el Santísimo Cristo de la Expiración, de la Hermandad del Museo.
En los últimos años se ha venido hablando de este crucificado como una más que probable elección, debido a la antigüedad de la imagen, tallada por Marcos Cabrera en 1575, y a su peso histórico y devocional. Sin embargo, la elección de Nuestro Padre Jesús en su Soberano Poder ante Caifás para el vía crucis de 2011 parece que restaba opciones al Cristo del Museo por tratarse de una imagen del mismo día de la Semana Santa y por aquella norma no escrita que lleva supuestamente a alternar las jornadas procesionales en la designación de cada año.
Sin embargo, la junta superior del Consejo ha tenido el gran acierto de no dejarse llevar por alternancias de día, estadísticas y otras cuestiones arbitrarias, y ha escogido para 2014 al impresionante crucificado titular de la cofradía que cierra el Lunes Santo sevillano, coincidiendo además con el Año Jubilar concedido a la misma por el cuarto centenario de la construcción de su capilla, adyacente al antiguo Convento de la Merced.
Un año después de su fantástica restauración por parte del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico (IAPH), el Santísimo Cristo de la Expiración será protagonista de la actividad cofradiera de la ciudad en el inicio de la Cuaresma de 2014. En concreto, será el próximo 10 de marzo cuando el Cristo del Museo se traslade a la Catedral para presidir el rezo colectivo del vía crucis.

lunes, 18 de noviembre de 2013

EL SAN JUAN DEL GRAN PODER TAMBIÉN PASARÁ POR EL TALLER DE PEDRO MANZANO


La Hermandad del Gran Poder ha encargado a Pedro Manzano la restauración de San Juan Evangelista, obra de Juan de Mesa de 1620 realizada al mismo tiempo que la imagen del Señor, debido al mal estado de conservación que presenta. De esta forma, la talla que acompaña en su paso de palio a la Virgen del Mayor Dolor y Traspaso será retirada del culto después de la próxima Semana Santa para su traslado al taller que el restaurador tiene en Triana.
La decisión se ha tomado tras conocer los resultados de un informe diagnóstico del estado de la talla elaborado por el propio Manzano que alerta de diferentes deficiencias que, si bien no son alarmantes, sí requieren de una profunda actuación. Hay que recordar que San Juan Evangelista fue restaurado en 1954 por Antonio Illanes, quien también intervino sobre la dolorosa. Posteriormente, en 1972 también realizaron una restauración José Pérez y Adolfo Castillo, y entre 1985 y 1986 hicieron lo propio los hermanos Cruz Solís, responsables de la aplaudida restauración de Nuestro Padre Jesús del Gran Poder en 2006.
De un tiempo a esta parte, Pedro Manzano se ha convertido en todo un hombre de confianza para las hermandades sevillanas e incluso de fuera. Actualmente están en su taller la Virgen de la Hiniesta Dolorosa, el Cristo de la Fundación y la Virgen de la Salud de San Gonzalo, además del Nazareno de Jerez. Asimismo, en los últimos años ha sido el encargado de restaurar a diversas imágenes, como el Cristo de las Siete Palabras, la Virgen de los Dolores y Misericordia, el Cristo de la Exaltación, la Virgen de la Luz Gloriosa de la Carretería y, más recientemente, la Soledad de San Buenaventura.

domingo, 17 de noviembre de 2013

SEVILLA EN JEREZ (XVII): El palio rojo y macareno de la Virgen del Desamparo

Retomamos la serie "Sevilla en Jerez" con la Hermandad del Prendimiento, popularísima cofradía que cierra el Miércoles Santo jerezano, como también ocurre curiosamente en Sevilla. En este capítulo nos vamos a centrar principalmente en el paso de palio de María Santísima del Desamparo, que es el que más relación ha tenido y tiene con la capital hispalense, pero además, por primera vez, vamos a ver un caso distinto, ya que con la Hermandad del Prendimiento no veremos sólo enseres o influencias sevillanas que llegan a la Semana Santa de Jerez, sino que también vamos a ver justo lo contrario: algo de Jerez que acaba en Sevilla, donde aún hoy se puede contemplar.
Pero vamos por partes. En el capítulo que dedicamos a la Hermandad de la Cena (ver aquí) ya nos referimos a un palio metálico de Eduardo Seco Imberg labrado en 1929 para la Virgen de los Dolores de las Penas de San Vicente, palio que hoy utiliza la cofradía de la Cena de Jerez para la salida de la Virgen de la Paz gloriosa, después de que durante doce años sirviera para cobijar cada Lunes Santo a la Virgen de la Paz y Concordia dolorosa. Pero antes de acabar en la Cena, esas caídas que fueron de la Hermandad de las Penas pasaron primero por la Hermandad del Prendimiento de Jerez, que las adquirió en 1935 para el paso de la Virgen del Desamparo, posible imagen de escuela valenciana de finales del siglo XIX que aún no había sido profundamente retocada por Sebastián Santos, lo que ocurriría en 1964.
De esta forma, la primera vez que ese palio pudo verse por las calles de Jerez fue sólo seis años después de su estreno en Sevilla.

La Virgen del Desamparo, bajo el palio que fue de la Hermandad de las Penas de San Vicente (Foto: cuestiondecofradias.blogspot.com)

Antes de llegar al palio macareno al que alude el título de este capítulo debemos detenernos en el manto que la Virgen del Desamparo lleva en la foto que acabamos de ver. Ese manto fue realizado en 1894 por el taller de Olmo para la dolorosa jerezana. Sin embargo, en 1940 es vendido a la Hermandad de la Quinta Angustia de Sevilla, convirtiéndose así en el primer caso (que no único, como veremos en próximos capítulos) de traslado de una pieza cofradiera de Jerez a la Semana Santa sevillana. Cada Jueves Santo, la Virgen de la Quinta Angustia sale a las calles con ese mismo manto que fue restaurado por Esperanza Elena Caro en 1974 y enriquecido por Emilio José Gómez Moreno años después.

La Virgen de la Quinta Angustia con el manto del taller de Olmo (1894) que perteneció hasta 1940 a la Virgen del Desamparo de Jerez

A finales de los años 40 del siglo pasado, el prioste de la Hermandad del Prendimiento, Pedro Domecq, decide encargar la confección de un nuevo palio para la Virgen del Desamparo. Su hermano José había sido prioste de la Hermandad del Desconsuelo, que compró a la Amargura de Sevilla el conjunto de palio y manto de Rodríguez Ojeda (ver aquí). Y Pedro Domecq también va a poner sus ojos en Sevilla a la hora de idear el nuevo palio del Desamparo.
En concreto, encarga a José Manuel Elena el diseño de un palio que se va a inspirar con total claridad en el palio rojo de la Macarena. Hacía algunos años que el palio de la Virgen de la Esperanza Macarena no era de ese color; sin embargo, el nuevo palio del Desamparo se mantiene en esa tonalidad, dado que el rojo es el color más característico de la Hermandad del Prendimiento.
Como en el desaparecido palio de la Macarena, obra de Rodríguez Ojeda, el palio de la Virgen del Desamparo combina el terciopelo rojo y la malla, y sobre ambos, los bordados en oro. Pero es que también los respiraderos, realizados por Esperanza Elena Caro, siguen la línea macarena, al ser de malla y no de orfebrería. En cuanto a los faldones, copia también la existencia de una cenefa horizontal y dos verticales en cada paño.

A la izquierda, el paso de palio de la Virgen del Desamparo. A la derecha, el palio rojo de la Macarena, en el que se inspira

El resultado es un conjunto extraordinario que se completa con un manto también de Elena Caro que tiene la particularidad de contar con la toca bordada sobre el mismo. La orfebrería es de Lorenzo Jiménez Rueda.


El estreno de este conjunto del paso de palio se produjo, por tanto, antes de que Sebastián Santos Rojas le diera a la Virgen del Desamparo su aspecto actual, bastante modificado con respecto al que se ve, por ejemplo, en las fotos antiguas con el palio de la Virgen de los Dolores de la Hermandad de las Penas.

María Santísima del Desamparo (Foto: elartedevestiralavirgen.es)

Debemos completar este capítulo haciendo mención al paso de misterio de Nuestro Padre Jesús del Prendimiento, talla de una gran devoción que durante años se atribuyó a la Roldana, pero que estudios recientes adjudican a Francisco Camacho de Mendoza. Cualquiera que sea su autor, estamos ante una de las mejores imágenes de la Semana Santa de Jerez.

Nuestro Padre Jesús del Prendimiento (Foto: dondepiedad.blogspot.com)

El paso sobre el que procesiona cada Miércoles Santo es obra del sevillano Manuel Guzmán Bejarano, realizado entre 1978 y 1984, y cuenta con unos ángeles de Luis Ortega Bru. Le acompañan en el paso San Pedro, talla antigua de autor desconocido, y dos sayones apodados "Candilejas" y "Chupaceite". Los sayones empujan al Señor, que aparece ya maniatado, mientras que San Pedro mira al cielo en actitud implorante junto al olivo.
Se da la particularidad de que este olivo, como ocurre en Sevilla con el misterio de Monte-Sión, no está creado a partir de la unión de ramas sueltas sobre un tronco artificial, sino que es un árbol real que cada año se escoge cuidadosamente, se corta y se sube al paso, llamando la atención poderosamente que siempre se trata de un ejemplar muy alto y frondoso.

Paso de misterio del Prendimiento a su salida de la Parroquia de Santiago, actualmente cerrada al culto por obras de restauración (Foto: Patronato Provincial de Turismo de Cádiz)

La calidad de imágenes y pasos, así como la gran cantidad de saetas que surgen en un barrio tan flamenco como es el de Santiago, hacen del Prendimiento una cofradía imprescindible de la Semana Santa de Jerez.

sábado, 16 de noviembre de 2013

ARS NOVA VICTORIA


El Patio Mayor del Ayuntamiento de Sevilla acoge hasta hoy, sábado, la exposición "Ars Nova Victoria: El primer regionalismo en los bordados sevillanos", una muestra conmemorativa del 450 aniversario de la Hermandad de las Cigarreras que ha permitido conocer de cerca el proyecto decorativo conjunto del pao de palio de la Virgen de la Victoria, así como otras insignias de la cofradía del Jueves Santo.
La elección de este espacio para ubicar la exposición no es casual, ya que hay que tener en cuenta que para el diseño de las bambalinas, primeras piezas bordadas que se realizaron del palio, su responsable, Pedro Domínguez López, se inspiró en la decoración plateresca de la fachada del Consistorio que da a la Plaza de San Francisco.
Como se explicaba en paneles y folletos, este profesor de modelado y vaciado ornamental de la Escuela de Bellas Artes de Sevilla fue encargado a comienzos de 1890 de la restauración de las fachadas trazadas por Diego de Riaño en 1526 para el nuevo Cabildo de la ciudad. En aquellos momentos recibe también el encargo por parte de la junta de gobierno de las Cigarreras, entonces establecida en la Iglesia de los Terceros, de proyectar un nuevo paso de palio para la Virgen de la Victoria. De esta forma introduce por vez primera el regionalismo en un paso al plasmar el estilo plateresco de las fachadas.
El planteamiento decorativo desarrollado para el palio y manto por Domínguez López fue una ruptura con los modelos románticos previamente utilizados en el bordado en Sevilla. Forjado en los ambientes regionalistas de Madrid, su aportación fue crucial para la introducción de la nueva estética en la Semana Santa y el patrimonio cofradiero, ya que si la ejecución material en 1894 de las bambalinas fue encargada a Emilia Salvador Ybarra, ante la imposibilidad de ésta de proseguir con el proyecto, se le encomendó entre 1895 y 1898 a Juan Manuel Rodríguez Ojeda el bordado del manto dibujado por Domínguez López, lo que supuso una colaboración esencial para el bordador en el desarrollo de sus trabajos posteriores, siendo un auténtico punto de inflexión en su propia evolución.
Los enseres y documentos expuestos estaban colocados en un espacio con forma de U. En primer lugar, veíamos la bambalina frontal del palio, con diseño de Pedro Domínguez López y bordado por Emilia Salvador Ybarra. Está realizada en terciopelo burdeos con decoración bordada en hilo de oro y sedas de colores. Originalmente las bambalinas exteriores fueron bordadas sobre terciopelo negro, trasplantándose a burdeos por Farfán Ramos entre 1925 y 1926. Recientemente, entre 2011 y 2012, fueron restauradas en el taller de Jesús Rosado en Écija tras la restitución del diseño original mediante técnicas digitales por Rafael de Rueda Burrezo.




Frente a la caída frontal, en una vitrina se mostraban diferentes documentos sobre aquellos años de la historia de la Hermandad de las Cigarreras y la realización del palio. En primer lugar, veíamos un recibo de Pedro Domínguez por los dibujos del palio y el manto, fechado el 10 de febrero de 1894. La cuantía por estos trabajos fue de 75 pesetas.


Seguimos con un documento del 2 de diciembre de 1894, que es el contrato de la hermandad con Emilia Salvador Ybarra por la adquisición de las bambalinas exteriores que ya estaban bordadas, pero que no se entregaron a la hermandad hasta que no fueron pagadas.


Del 24 de febrero de 1895 es el contrato entre la hermandad y Juan Manuel Rodríguez Ojeda para el bordado de la guardilla del manto.


El 18 de marzo de 1895 se hacía constar en el acta del cabildo general la imposibilidad de Emilia Salvador Ybarra de bordar el manto de la Virgen de la Victoria y el encargo de dicha tarea a Juan Manuel Rodríguez Ojeda.


El 16 de abril de 1895 se apuntaba el asiento contable del pago a Papelería Ferrer (Sierpes, 5) por la compra de 25 metros de papel para el dibujo del manto.


Un mes más tarde, el 16 de mayo de 1895, se emitía la factura de Cristóbal Ortega por la peana del paso de palio.


Del 21 de febrero de 1896 es el recibo del pago del coche a Pedro Domínguez López, diseñador del palio y manto, por asistir a la casa del bordador Rodríguez Ojeda.


El 8 de mayo del mismo año se reconocía la deuda de 32.878,75 reales con Cristóbal Ortega por la realización de los respiraderos del paso de palio.


El 1 de febrero de 1897 se firmaba el contrato entre la Hermandad de las Cigarreras y Juan Manuel Rodríguez Ojeda para el bordado del centro del manto y la crestería del palio.


Algo más de un año después, el 30 de abril de 1898, se realizó la factura de entrega de mayor cuenta de Juan Manuel Rodríguez Ojeda por los trabajos del bordado del manto y la crestería del palio.


Se completaba esta vitrina con un cliché del fotógrafo Almela con el paso de palio de la Virgen de la Victoria por la Plaza de la Encarnación fechado entre 1897 y 1899.


Colgadas y enmarcadas había otras tres fotografías antiguas del paso de palio en aquella época. De izquierda a derecha veíamos el mismo cliché anterior de Almela (1897-1899), un cliché de Beauchy conservado en la Hispanic Society of New York (1897-1899) y otro cliché de Almela de 1900.


Otra foto muy curiosa, ésta de 1891, es una que se encontraba repartida por cada uno de los talleres de la Fábrica de Tabacos (hoy Universidad) sobre un cepillo en el que se recogían donativos para el culto a la Virgen de la Victoria.


De 1896 son los respiraderos del paso de palio, diseñados por Pedro Domínguez y labrados en metal cincelado plateado y dorado por Cristóbal Ortega. En 1983 fueron restaurados por Orfebrería Triana, donde se hicieron las cartelas ovales centrales en metal dorado.




Bajo el paño frontal de los respiraderos había otra vitrina en la que se exponía en primer lugar el Libro de cargo y data de caudales recaudados por la Hermandad de las Cigarreras en la Fábrica de Tabacos (1891-1905).


También veíamos una memoria de los servicios prestados por la Asociación de Socorros a las operarias de la Fábrica de Tabacos bajo la advocación de Nuestra Señora de la Victoria (30 de junio de 1896).


Finalmente, del 30 de octubre de 1901 es un oficio de la junta de gobierno de la Hermandad de las Cigarreras al Consejo de Administración de la Compañía Arrendataria de la Fábrica de Tabacos, solicitándole una subvención equivalente por la desaparición de la Asociación de Socorros al crearse la Caja de Auxilios de la Compañía.


Continuamos con una saya de tisú de plata con decoración bordada en hilo metálico dorado y sedas de colores por Juan Manuel Rodríguez Ojeda en 1905. Originalmente esta saya estaba bordada sobre terciopelo blanco, pero en 1956 el Taller de Caro la pasó a tisú de plata. En 2011-2012 fue restaurada por Jesús Rosado, que le devolvió el diseño original.


A continuación, se mostraba la foto de autor desconocido que ha servido de cartel de la exposición. Fue realizada entre 1910 y 1920, y en ella vemos a la Virgen de la Victoria con el manto de salida, la saya de Rodríguez Ojeda y la peana de Cristóbal Ortega.


Una saya más moderna, de 1995, se veía a continuación. Fue bordada por Talleres Santa Bárbara sobre terciopelo azul con decoración bordada en hilo metálico dorado y sedas de colores. El diseño de esta pieza se realizó tomando también el taller de bordados como inspiración la decoración plateresca de las fachadas del Ayuntamiento, de Diego de Riaño.



Seguimos con una pintura en óleo sobre lienzo, obra de Rafael Blas Rodríguez (1920), restaurada por Mercedes González Fuentes y María Arjonilla en 2013. En ella aparece la Virgen de la Victoria con el manto de salida, aún sobre terciopelo negro, y con la saya de Rodríguez Ojeda.



Vemos seguidamente el manto procesional de la Virgen de la Victoria, diseñado por Pedro Domínguez López y bordado por Juan Manuel Rodríguez Ojeda entre 1895 y 1897. Está realizado en terciopelo burdeos con decoración bordada en hilo metálico dorado y sedas de colores. El manto se realizó en dos fases: una primera en 1895 consistente en la guardilla exterior, y una segunda en 1897 consistente en centro y costados. Originalmente fue bordado sobre terciopelo negro, pero entre 1928 y 1929 fue pasado a terciopelo burdeos por José Caro. Entre 1981 y 1982 fue restaurado en el Taller La Esperanza y en 1998 por Fernández y Enríquez. El manto estaba situado sobre la peana de metal cincelado plateado y dorado, obra de Cristóbal Ortega (1895).








También se exponía el faldón delantero del paso de palio de la Virgen de la Victoria, diseñado por Ignacio Gómez Millán en 1928. Son de terciopelo burdeos con decoración bordada en hilo metálico dorado y sedas de colores. Originalmente fueron bordados por José Caro entre 1928 y 1929. Ante el deficiente estado de conservación que presentaban, entre 2010 y 2011 se realizaron réplicas en el taller de Jesús Rosado, previa restitución digital del diseño por parte de Rafael de Rueda Burrezo.





Frente a los faldones podíamos ver los bordados interiores de una de las caídas laterales del palio. Son de terciopelo burdeos con bordados en hilo metálico dorado y sedas de colores, y el diseño se debe a José Fe Escalona. Originalmente fueron bordadas por Francisco Farfán Ramos en 1925 en sobrepuestos de tisú de oro. En 2010-2011 se realizaron réplicas en el taller de Jesús Rosado en oro fino y sedas de colores mediante la técnica del oro tendido y punto llano.






Completaban la exposición dos insignias del cortejo de la Hermandad de las Cigarreras. Por un lado, el Sinelabe, diseñado por Ignacio Gómez Millán y bordado por José Caro en 1928-1929. Está bordado en terciopelo burdeos con decoración de hilo metálico dorado y sedas de colores. En 2002-2003 fue restaurado por Fernández y Enríquez.




De la misma época, mismo diseñador y mismo bordador es el Senatus, también bordado en hilo metálico dorado y sedas de colores sobre terciopelo burdeos.





José Manuel López Bernal ha sido el comisario de esta exposición con la que la Hermandad de las Cigarreras ha completado la brillantísima celebración de su 450 aniversario fundacional, permitiendo al tiempo saber más acerca de unos bordados inspirados en la arquitectura del Ayuntamiento y que dieron lugar a una nueva etapa en el bordado cofradiero sevillano.