viernes, 29 de septiembre de 2017

EL GRAN PODER DE CAMAS PONE LUZ AL BESAMANOS A LA VIRGEN DE REGLA


El besamanos a María Santísima de Regla, de la Hermandad de los Panaderos, ha comenzado este viernes en la Capilla de San Andrés y permanecerá abierto hasta la tarde del próximo domingo; todo un fin de semana para besar las manos de la dolorosa que cierra el Miércoles Santo y que en esta ocasión se encuentra flanqueada por dos faroles cedidos por la Hermandad del Gran Poder de Camas.
Se trata de dos de los cuatro faroles que ya en marzo cedió esta cofradía del Aljarafe a la Hermandad de San Gonzalo para el vía crucis extraordinario que presidió por las calles del Barrio León la imagen de Nuestro Padre Jesús en Su Soberano Poder (ver).
También la Hermandad del Baratillo ha colaborado en el montaje del altar del besamanos de la Virgen de Regla cediendo la peana de plata sobre la que se encuentra elevada, y que tiene la palabra "Charitas" en una cartela en la parte frontal.
Por su parte, la dolorosa viste manto azul bordado en oro por Mariano Martín Santonja siguiendo el diseño de un antiguo manto de Rodríguez Ojeda que hoy posee la Hermandad de la Soledad de Cantillana. Asimismo, tiene una saya con bordados de Ojeda de 1899 restaurada por Santonja y pasada a nuevo terciopelo azul este mismo año.
Sobre la cabeza luce la corona de oro de su Coronación Canónica, de la que se acaban de cumplir siete años, obra de los Hermanos Delgado López, mientras que en el pecherín lleva un puñal, un alfiler con su advocación y la réplica de la Medalla de la Ciudad, concedida por el Ayuntamiento de Sevilla precisamente con motivo de su Coronación.
Detrás, además de dos candelabros plateados con velas blancas, vemos dos de las jarras de su paso de palio y al fondo un dosel de cultos con la peana en la que la Virgen ha presidido días atrás los cultos en su honor, ahora ocupada por las mismas flores de varias especies y tonalidad rosa que se sitúan en distintos puntos del altar.
A cada lado de la peana se reparten un buen número de candeleros con cera blanca y abajo, en el centro, dos pequeños candelabros escoltan a una pequeña talla de la Inmaculada Concepción.

































jueves, 28 de septiembre de 2017

LA PATRONA DE JEREZ RECORRIÓ LAS CALLES ACOMPAÑADA DE SUS DEVOTOS


Jerez se rindió el pasado domingo a su Patrona, la Virgen de la Merced, acompañándola en su salida procesional como cada 24 de septiembre. Cada una de las calles de su itinerario estaban llenas de devotos que quisieron seguirla en todo momento, entre ellos algunas personas de fuera de la ciudad, a lo que contribuyó el hecho de haber caído este año la fiesta en domingo.
Un largo cortejo de cofrades antecedía al paso de la Patrona saliendo de la Basílica de la Merced a partir de las seis y media de la tarde, tomando a continuación la calle del mismo nombre hacia la Plaza de Santiago y la calle Ancha.
La Agrupación Musical San Juan antecedía la procesión, seguida posteriormente por la cruz de guía de la Hermandad del Transporte, que tiene su sede en la misma basílica. Todas las hermandades de la ciudad estuvieron representadas con sus estandartes, ordenadas según su día de salida, salvo las hermandades sacramentales, que figuraban detrás. La última era precisamente la del Transporte, que daba paso a los miembros de la Unión de Hermandades y de la Corporación Municipal, incluyendo a la misma alcaldesa, Mamen Sánchez, que quiere que el día de la Merced deje de ser festivo en Jerez y cerrando la representación del Consistorio la ex alcaldesa, María José García-Pelayo.
Finalmente, varias comunidades religiosas, las insignias basilicales (tintinábulo y conopeo), que también forman parte cada Domingo de Ramos del cortejo de la Hermandad del Transporte, y el obispo de la Diócesis de Asidonia-Jerez, José Mazuelos, que iba inmediatamente delante del paso de la Patrona.
















Grandes varas de nardos adornaban en las esquinas el paso de la Virgen de la Merced, que lucía su impresionante ajuar tanto de bordados como de orfebrería, además de su habitual escapulario, fajín militar y un buen número broches y medallas.
Caminaba con celeridad el paso, comandado por el capataz Martín Gómez Moreno; tanto que en algunos momentos en la esquina de Ancha con Porvera casi atropellaba al propio obispo. Y detrás, un gran número de devotos que hacían que la Banda Municipal de Música de Jerez se mantuviera bastante alejada del paso y que sus sones fueran en determinados momentos casi imperceptibles.
La Iglesia de la Victoria estaba abierta de par en par, presidida por la Virgen de la Soledad, y la Patrona se detuvo frente a la puerta, aunque sin volverse. Después, el capataz quiso dedicar la siguiente levantá a las madres y el paso continuó mientras la banda interpretaba la marcha "Virgen de las Aguas".
La amplitud de la calle Porvera permitió moverse alrededor del paso con una cierta facilidad, aunque tampoco demasiada, dado el fervor que despierta la imagen de la Patrona, de origen incierto, pero todas las teorías coinciden en situarlo alrededor de reconquista de la ciudad por parte de Alfonso X.
Más adelante, por la misma calle Porvera donde hasta hace unos años había precisamente un monumento al rey sabio, se pudieron escuchar tras el paso las marchas "San Juan Bosco" y "El Santo Patrón".



























La Virgen de la Merced dejó atrás Porvera y sus frondosos árboles y salió a la última luminosidad de la tarde en la confluencia de la Alameda de Cristina y la Puerta de Sevilla, para pasar por delante del Convento de Santo Domingo y entrar en la calle Larga.
"El Corpus" fue la marcha que comenzó a interpretar por esta zona la Banda Municipal, aunque la interrumpió cuando el paso se detuvo, volviendo a tocarla desde el principio cuando reanudó su camino. Antes de alcanzar la Rotonda de los Casinos volvió a pararse para un relevo de costaleros junto al característico edificio de la antigua Caja de Ahorros de Jerez.
Y a continuación, la Virgen de la Merced pasó al lado de la fuente de la Rotonda, inmersa en obras de restauración, tramo para el que la banda interpretó la marcha "Cristo de la Viga", con la que llegó hasta la esquina con la Plaza del Banco, por la que después se internó a los sones de "El Cristo de la Lanzada", marcha lamentablemente interrumpida al pararse el paso, que luego siguió con "Reina del Carmelo" hacia la calle Eguilaz.










































Desde Eguilaz, la Virgen de la Merced salió a la Plaza del Clavo y a la calle Tornería, desde la que pasó a la Plaza Rafael Rivero acompañada por los sones musicales de la marcha “Cristo de la Defensión”. Era ya prácticamente noche cerrada cuando el paso se adentró en la Plaza de San Marcos con la marcha “Virgen del Castillo Viejo”.
Precisamente, la Parroquia de San Marcos era un punto destacado en el itinerario de la procesión de la Patrona de Jerez. La puerta principal del templo estaba abierta y la Hermandad de la Cena había colocado un altar presidido por la imagen de Santa María de la Paz y Concordia, titular que procesiona bajo palio cada Lunes Santo por las calles de Jerez.
La Virgen de la Paz, que llevaba una medalla con el emblema de la Orden de la Merced en el pecherín, recibió así a la Patrona, que se detuvo ante la parroquia. El obispo, acompañado de las autoridades municipales, entró en San Marcos para colocarse ante el altar montado por la hermandad y se produjo el canto de la Salve y unas oraciones a la Patrona, que después se marchó hacia la calle Padre Rego a los sones de “Santa Teresa de Jesús”. Más adelante, la Virgen de la Merced salió a la Plaza de la Compañía con la marcha “La Pilarica”.


























La Virgen emprendió el regreso a su Basílica por calle Francos, Plaza de San Juan, Oliva y Plaza de Santiago, tomando nuevamente la calle Merced hasta su casa, a la que volvió sobre las diez y media de la noche.
Acababa así un nuevo encuentro de Jerez con su Virgen de la Merced, una nueva muestra de la entrega absoluta de los jerezanos, para los que el 24 de septiembre será siempre un día especial, el día de su Patrona.