El pasado sábado 24, festividad de María Auxiliadora, tuvo lugar por las calles de Triana la salida procesional de la archicofradía que la tiene como titular, con sede en la Parroquia de San Juan Bosco. Durante algo más de seis horas, la hermandad salesiana estuvo recorriendo el antiguo arrabal con su cortejo, compuesto por alumnos y ex alumnos del centro educativo, así como sus cofrades y algunas hermandades trianeras.
Todo comenzó a las seis y media de la tarde en una calle Condes de Bustillo perfectamente engalanada para la ocasión con farolillos, banderas, colgaduras y pancartas con mensajes de alabanza a la Virgen. El cortejo del primer paso, el de San Juan Bosco, contaba con la cruz alzada entre ciriales, y unos primeros tramos separados por la bandera de Santo Domingo Savio y por la de los antiguos alumnos.
A continuación, tras el cuerpo de acólitos con cuatro ciriales, salió del templo el paso de San Juan Bosco; unas andas que por segundo año se han podido ver por la calle después de su estreno en 2024. Se trata de un nuevo paso que está tallando José Antonio García Flores y que año a año irá completándose. De momento, ha salido sólo con los candelabros y el frontal del canasto tallados.
En el momento de la salida, comenzó su intervención la Agrupación Musical Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Fuensanta, de Morón de la Frontera, que está celebrando en este 2025 su XXXV aniversario fundacional. Interpretó el Himno, seguido por un excesivamente largo redoble de tambor mientras el paso bajaba la rampa, giraba a su derecha y ganaba metros en Condes de Bustillo, hasta que por fin se paró por vez primera.
Fue en la siguiente chicotá en la que pudimos escuchar la primera marcha tras San Juan Bosco, cuyo paso estaba adornado con claveles blancos, lisiantus y algunos nardos. Esta composición fue "Alma Mater", con la que el santo llegó hasta el final de la calle, poco antes de la confluencia con San Jacinto.
Con la marcha "El Mesías", San Juan Bosco, al que acompañan dos niños, giró a la derecha en la calle San Jacinto. Iba con cierta rapidez este paso en los primeros metros del recorrido. Había que dejar hueco para la salida del paso de María Auxiliadora, momento que se supo que se estaba produciendo cuando se oyeron los primeros cohetes que anunciaban que estaba en la calle.
Entretanto, San Juan Bosco siguió con una nueva chicotá, ésta a tambor, y después se produjo el primer relevo de costaleros. Tras él, el paso continuó su camino por San Jacinto, ahora mientras la agrupación moronense interpretaba la marcha "La puerta del hierro".
Dejamos a San Juan Bosco buscando la Capilla de la Estrella y encontramos a María Auxiliadora poco después de salir avanzando por Condes de Bustillo a los sones de "Como tú ninguna". El paso también contaba con un exorno floral de color blanco, sobre el que venía en triunfo la 'Sentaíta' de Triana.
Delante, un cortejo más amplio que el del primer paso, donde vimos representación de las hermandades del Carmen de Santa Ana, San Gonzalo, el Cachorro y el Rosario del Barrio León; la primera con una bandera, las dos siguientes con los banderines de sus grupos jóvenes y la cuarta con su estandarte corporativo.
La Banda de Música Fernando Guerrero, de Los Palacios y Villafranca, acompañaba a María Auxiliadora, para la que en la siguiente chicotá, que llevaría a la Virgen hasta la calle San Jacinto, tocó la marcha "Espíritu Santo". Esta composición se reinició porque el paso emprendió la revirá sin detenerse antes. Eso sí, llamó la atención que esta segunda interpretación fue interrumpida por la banda cuando el paso aún no se había parado, haciéndolo instantes después.
Tras esta parada, María Auxiliadora siguió adelante a los sones de "Virgen de los Negritos", mientras de tanto en tanto se lanzaba algún cohete, afortunadamente desde una distancia del cortejo algo mayor que en años anteriores.
Finalizada la marcha procesional de Pedro Morales, el paso volvió a detenerse para un relevo de costaleros prácticamente en el mismo sitio donde antes lo había hecho la cuadrilla del paso de San Juan Bosco. Y luego María Auxiliadora reanudó su camino con "Madre Hiniesta".
Desde ahí, María Auxiliadora siguió recorriendo Triana, pasando a lo largo de su itinerario por la Capilla de la Estrella, la de los Marineros, la Parroquia de Santa Ana o la Capilla del Rocío, hasta volver a la parroquia salesiana a las doce y media de la noche.
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